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LA HISTÒRIA DEL DEPORTE EN BANYOLES HASTA LOS JJOO'92

LA HISTÒRIA DEL DEPORTE EN BANYOLES HASTA LOS JJOO

Editado en catalán per MMV, el año 2017, con un resumen en castellano e inglés

Artículo aparecido en el diario El Punt, bajo el nombre «El deporte bañolense tiene una historia», el 7 de diciembre de 2017, y firmado por Ramón Esteban, en el cual el periodista hace una descripción del libro.

Los Juegos Olímpicos de 1992 fueron un punto de inflexión para el deporte en Banyoles, entre otras razones porque supusieron la construcción del primer pabellón de la ciudad y esto permitió la expansión de los deportes de pista. Desde entonces han crecido mucho el número de clubes, de disciplinas y de practicantes, hasta el punto que la ciudad del Lago ha hecho del deporte una marca identitaria y está dando prioridad a la promoción del llamado turismo deportivo.

Pero antes de la cita olímpica, ¿Banyoles era una ciudad deportiva? El libro La historia del deporte en Banyoles hasta los JJOO'92 (MMV Ediciones) pone al alcance del lector suficiente información para que él mismo se responda la pregunta. El autor, Joan Anton Abellan, describe 38 disciplinas diferentes -con fotografías de gran valor documental-, la mayoría de las cuales practicadas a partir de finales del siglo XIX o principios del XX, como en el resto del país. Las primeras referencias, sin embargo, son anteriores. La más antigua es del "juego de la pelota de viento", a finales del siglo XVI. Y esto se sabe porque quedó documentada la muerte de un hombre tras una pelea producida cuando estaba jugando a ese deporte.

La lista de Abellan incluye modalidades que ahora no se admiten como deporte. Por ejemplo, la lucha de gallos o el tiro al pato. Respecto de la primera, se sabe que a principios del siglo pasado existía el club Sport Gallista, que organizó varios torneos. En cuanto a la segunda, se conserva una instancia de 1890 en el que se pide permiso para establecer "tiro de gallinas, patos y demás aves en una casita pesquera" y hay testimonios de "caza del pato" en los años veinte del siglo pasado. También se practicaban algunos deportes en lugares donde ahora no se tolerarían porque son espacios naturales protegidos: motonáutica en el lago y motocross en la playa de Espolla de Melianta. Llama la atención que, contrariamente a lo que se podría suponer, la disponibilidad del lago no fuera un incentivo para los deportes acuáticos, los cuales -en cuanto a número de practicantes- no tienen una relevancia especial antes de los Juegos. Las disciplinas de más recorrido son las que actualmente se mantienen como más populares, como el balonmano, el fútbol y el baloncesto. Queda patente también la trascendencia que en las décadas preolímpicas tuvieron a la hora de fomentar determinados deportes dos clubes locales: el Centro Excursionista y el Club Natación.

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